Transformarnos con la Naturaleza
Hoy honro a la Tierra…
A la montaña que me sostuvo.
Al río que me limpió.
Al bosque que me recordó quién soy.
Y al mar… que me susurra siempre que fluir también es fuerza.
En cada paso, cada gota, cada silencio…
dejo atrás versiones de mí que ya no me sirven,
y me abrazo desde lo más real.
Transformarnos también es un acto de amor hacia el planeta.
Porque cuando volvemos a nuestra esencia,
nos volvemos más conscientes, más presentes,
más tierra, más agua, más vida.
Feliz Día del Planeta.
Que sigamos creciendo con ella,
cambiando con ella,
y protegiendo su sabiduría con cada paso que damos.
-Sheila